Después de un bajón en sus últimos trabajo Lydia Loveless ha regresado en mejor forma con la inspiración que siempre da el tan manido tema del desamor. Aunque "Nothing's Gonna Stand in My Way Again" habla de una ruptura sus canciones no transmiten tristeza, al contrario, la luminosidad lo impide, hay temas rockeros, medios tiempos, baladas y buenos estribillos, recuerda a una Belinda Carlisle bajo la etiqueta del Alt Country y eso no puede ser malo.
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metal80
Mensajes : 1713 Fecha de inscripción : 15/07/2013 Edad : 55 Localización : Gijon
Pasó un tanto desapercibido, pero como tú dices, es una joya. La verdad es que en el año en que fue publicado, la competencia era muy dura.
En su estilo lo considero de los mejores discos de los 80, aunque no lo meteria ni en la etiqueta AOR, ni como disco de hard/heavy, aunque supongo que esta mas cerca del AOR, tiene bastante de pop el disco.
el murciélago
Mensajes : 45516 Fecha de inscripción : 28/02/2013 Edad : 47 Localización : El paraiso
Pasó un tanto desapercibido, pero como tú dices, es una joya. La verdad es que en el año en que fue publicado, la competencia era muy dura.
En su estilo lo considero de los mejores discos de los 80, aunque no lo meteria ni en la etiqueta AOR, ni como disco de hard/heavy, aunque supongo que esta mas cerca del AOR, tiene bastante de pop el disco.
Me encanta,, cuando pongo el vinilo me transporta.. La producción tiene mucho que ver
La música de Cut Worms se inspira en los comienzos del pop, cuando el único fin era componer una bonita melodía y el resto (producción, arreglos, instrumentos) pasaba a un segundo plano. Max Clarke sigue las doctrinas de Buddy Holly, The Everly Brothers y Brian Wilson, con la sencillez por bandera, de ahí que también recuerde a Jonathan Richman, Nick Lowe o M.Ward, por buscar un referente actual. Su disco homónimo, es eso ni más ni menos, la búsqueda del estribillo inmaculado con la New Wave y el Rock de los 50 como telón de fondo.