Con el término "Accidentes Domésticos Rockeros" nos referiremos a cualquier suceso imprevisto que supone un daño a la integridad de nuestra colección de discos, revistas, camisetas o cualquier otro material rockero que se precie o bien, cualquier suceso imprevisto que suponga un daño a nuestra integridad física como personas (caso de un fiestorro rockero doméstico con el resultado de heridas, por ejemplo).

Ante todo debo decir que soy bastante cuidadoso con mis discos, revistas y demás, así es que mi número de accidentes domésticos rockeros es bastante bajo.

A lo que voy. Este mes compré la "This Is Rock", leí un artículo de José Abellán sobre Storm Thorgerson donde repasaba todas sus portadas con Pink Floyd y al hablar de "Pulse" decía que la gente le escribía a Storm Thorgerson preguntándole cómo cambiarle la pila a la caja y en internet hay vídeos que "explican" cómo proceder.




Decidí ponerme manos a la obra y devolver dicho artefacto a la vida, me fui al cuarto de los trastos, abrí la caja negra de los cedés progresivos y cogí "Pulse" de tal manera que me quedé con la caja en la mano y el libro con las fotos y los dos cedés y el tablero de cartón grueso se cayeron... al cubo de fregar.




A pesar del pánico del momento tuve suerte de que la fregona estaba metida en el cubo y el libro de fotos no se hundió del todo y, gracias a mis reflejos de ex-portero de fútbol, lo rescaté rápidamente.

Evaluación de daños: dos cedés mojados (fácilmente subsanable), el libro empapado, pero no del todo (que limpié enseguida con servilletas de papel y le puse hojas de revista entre las páginas para evitar que se pegaran por la humedad) y el tablero de cartón grueso, indemne.

Ahora venía la parte técnica: ver vídeos en Youtube para cambiar la pila. Todo muy fácil, pero a la hora de la verdad, nasti de plasti: por más palanca que hacía con un destornillador, no cedía el compartimento del led, la otra "técnica" consistente en usar un cubierto (cuchillo y tenedor) tampoco servía, etc.

Desesperado, cogí un cúter y cortando y pegando tirones (y haciéndole un siete al interior de la caja) conseguí sacar el compartimento del led. Para mi sorpresa, el led se alimentaba no con una pila de botón, sino con una pila pequeña LR6 de Procell/Duracell, caducada en marzo de 1998 (¡hacía más de 15 años!). Le puse otra pila alcalina y listo, ya tengo el led funcionando.

Al final conseguí secar bien el libro de fotos (el agua apenas le ha dejado marcas) y también cambiarle la batería (la próxima vez será más fácil) y, señoras y señores, ahora mismo tengo "Pulse" presidiendo el salón de mi casa. Es genial, la gente ve el led rojo metido entre los libros y se acojona. ¿Es una cámara de seguridad, me están grabando, es un antirrobo, es...? Sólo por eso ya vale la pena el mal rato que pasé.



Ya hablando en serio, Lou, a ti que te parece este artefacto exagerado, la idea de Storm Thorgerson para la caja de "Pulse" fue reflejar la idea del latido del corazón que abre "Dark Side Of The Moon": el led rojo no es más que un corazón que "late" 74 veces por minuto.
Y acabo ya el tema, si mi recuerdo de 1995 era el pasillo del Carreful lleno de "Pulses" latiendo, el de 2006 era el de un guiri en el Carreful explicándome que "PINK FLOYD IN CONCERT P•U•L•S•E", su respectiva edición en doble DVD, era la rehostia y sonaba espectacular y vaya si tenía razón.

Dr. Jaus escribió:

Con el término "Accidentes Domésticos Rockeros" nos referiremos a cualquier suceso imprevisto que supone un daño a la integridad de nuestra colección de discos, revistas, camisetas o cualquier otro material rockero que se precie o bien, cualquier suceso imprevisto que suponga un daño a nuestra integridad física como personas (caso de un fiestorro rockero doméstico con el resultado de heridas, por ejemplo).

Ante todo debo decir que soy bastante cuidadoso con mis discos, revistas y demás, así es que mi número de accidentes domésticos rockeros es bastante bajo.

A lo que voy. Este mes compré la "This Is Rock", leí un artículo de José Abellán sobre Storm Thorgerson donde repasaba todas sus portadas con Pink Floyd y al hablar de "Pulse" decía que la gente le escribía a Storm Thorgerson preguntándole cómo cambiarle la pila a la caja de "Pulse" y en internet hay vídeos que "explican" cómo proceder.




Dicho y hecho, me fui al cuarto de los trastos, abrí la caja negra de los cedés progresivos y cogí "Pulse" de tal manera que me quedé con la caja en la mano y el libro con las fotos y los dos cedés y el tablero de cartón grueso se cayeron... al cubo de fregar.




A pesar del pánico del momento tuve suerte de que la fregona estaba metida en el cubo y el libro de fotos no se hundió hasta el fondo y, gracias a mis reflejos de ex-portero de fútbol, lo rescaté rápidamente.

Evaluación de daños: dos cedés chorreando (fácilmente subsanable), el libro empapado no del todo (que limpié enseguida con servilletas de papel y le puse hojas de revista entre las distintas páginas para que no se pegaran por la humedad) y el tablero de cartón grueso, indemne.

Ahora venía la parte técnica: ver vídeos en Youtube para cambiar la pila. Todo muy fácil, pero a la hora de la verdad, nasti de plasti: por más palanca que hagas con un destornillador, no cede el compartimento del led, ni con otra "técnica" consistente en usar un cubierto (cuchillo y tenedor) tampoco, ni...

Desesperado, cogí un cúter y cortando y pegando tirones (y haciéndole un siete al interior de la caja) conseguí sacar el compartimento del led. Para mi sorpresa, el led se alimentaba de una pila pequeña LR6 de Procell/Duracell, caducada en marzo de 1998 (¡hacía más de 15 años!), no de una pila de botón. Le puse otra pila alcalina y listo, ya tengo el led funcionando.

Al final conseguí secar bien el libro de fotos (el agua apenas le ha dejado marcas) y también cambiarle la batería (la próxima vez será más fácil) y ahora mismo tengo "Pulse" presidiendo el salón. Es genial, la gente ve el led rojo metido entre los libros y se acojona. ¿Es una cámara de seguridad, me están grabando, es un antirrobo, es...? Sólo por eso ya vale la pena el mal rato que pasé para echar a andar de nuevo el led.



Ya hablando en serio, Lou, a ti que te parece este artefacto exagerado, la idea de Storm Thorgerson para la caja de "Pulse" fue reflejar la idea del latido del corazón que abre "Dark Side Of The Moon", de ahí el led rojo que no es más que un corazón que "late" 74 veces por minuto.

Guauu....genial odisea esta que has contado. Puedo imaginarme esas caras mientras observan ese punto que se paga y enciende sobre una estanteria......

[/quote] Guauu....genial odisea esta que has contado. Puedo imaginarme esas caras mientras observan ese punto que se paga y enciende sobre una estanteria...... [/quote]

Amigo murciélago, si te digo la verdad, la primera que se asustó al ver el led fue mi mujer.
Por cierto, has respondido mientras retocaba aquí y allá el mensaje.
A los demás, animaos a relatar qué desventuras y sufrimientos habéis tenido con vuestros bienes rockeros más preciados.

Clásica historia con la que todos nos hemos enfrentado alguna vez:cubo de la fregona-material rockero.Lo más gracioso es que jamás podría imaginarme que existiesen videos por YouTube explicando como se cambia la lucecita de "Pulse"???

Si tengo tiempo contaré alguna tropelía.De momento estoy recordando que mi madre solía utilizar una cinta de Víctor Manuel para nivelar un mueblecito que se quedaba torcido,claro, que no creo que eso sea un accidente ni que Víctor Manuel sea rockero.

Yo tenía un amigo en la época del instituto -que, por cierto, hoy es un gran guitarrista- cuya madre, cada vez que el niño hacía una trastada, en lugar de castigarle sin salir o perseguirle con la zapatilla, como cualquier buena madre hubiera hecho, le daba por romperle algunos vinilos. En uno de los ataques de ira de aquella buena mujer resulta que ,"¡Ay!, hizo añicos el vinilo de "Axis Bold as Love" de Hendrix, que unos días antes yo le había prestado.

Tengo que decir, en su honor, que mi colega me compró uno nuevo.

Mi familia tiene especila fijación con mis figuras rockeras: mi figura de Alice Cooper fue enviada al suelo de un culetazo de mi madre a la estanteria sobre la que estaba que tuvo como resultado las dos manos limpiamente amputadas; Lemmy también sufrió amputaciones de los dos brazos cortesia de un sobrino que usó al Motorhead como herramienta para repartir palos por toda la casa.

Auambabuluba balambambú escribió:

Yo tenía un amigo en la época del instituto -que, por cierto, hoy es un gran guitarrista- cuya madre, cada vez que el niño hacía una trastada, en lugar de castigarle sin salir o perseguirle con la zapatilla, como cualquier buena madre hubiera hecho, le daba por romperle algunos vinilos. En uno de los ataques de ira de aquella buena mujer resulta que ,"¡Ay!, hizo añicos el vinilo de "Axis Bold as Love" de Hendrix, que unos días antes yo le había prestado.

Tengo que decir, en su honor, que mi colega me compró uno nuevo.

Joder! te juro que tengo una historia idéntica a la tuya,sustituyamos a la madre por un padre comunista con fobia por todo lo americano, el de Hendrix por "Intensities in 10 Cities" y la historia es idéntica,eso sí,mi amigo nunca me repuso el disco de Nugent pero me dijo que me quedase con el que había hecho el intercambio,"Fair Warning",que bueno,no me puedo quejar.

Evil Elvis escribió:

Mi familia tiene especila fijación con mis figuras rockeras: mi figura de Alice Cooper fue enviada al suelo de un culetazo de mi madre a la estanteria sobre la que estaba que tuvo como resultado las dos manos limpiamente amputadas; Lemmy también sufrió amputaciones de los dos brazos cortesia de un sobrino que usó al Motorhead como herramienta para repartir palos por toda la casa.

Estas cosas son muy sentidas y las sufrimos de veras pero la forma que tiene de contarlo el amigo Evil me resulta imposible no reirme

LOU RIP escribió:

Auambabuluba balambambú escribió:

Yo tenía un amigo en la época del instituto -que, por cierto, hoy es un gran guitarrista- cuya madre, cada vez que el niño hacía una trastada, en lugar de castigarle sin salir o perseguirle con la zapatilla, como cualquier buena madre hubiera hecho, le daba por romperle algunos vinilos. En uno de los ataques de ira de aquella buena mujer resulta que ,"¡Ay!, hizo añicos el vinilo de "Axis Bold as Love" de Hendrix, que unos días antes yo le había prestado.

Tengo que decir, en su honor, que mi colega me compró uno nuevo.

Joder! te juro que tengo una historia idéntica a la tuya,sustituyamos a la madre por un padre comunista con fobia por todo lo americano, el de Hendrix por "Intensities in 10 Cities" y la historia es idéntica,eso sí,mi amigo nunca me repuso el disco de Nugent pero me dijo que me quedase con el que había hecho el intercambio,"Fair Warning",que bueno,no me puedo quejar.

Evil Elvis escribió:

Mi familia tiene especila fijación con mis figuras rockeras: mi figura de Alice Cooper fue enviada al suelo de un culetazo de mi madre a la estanteria sobre la que estaba que tuvo como resultado las dos manos limpiamente amputadas; Lemmy también sufrió amputaciones de los dos brazos cortesia de un sobrino que usó al Motorhead como herramienta para repartir palos por toda la casa.

Estas cosas son muy sentidas y las sufrimos de veras pero la forma que tiene de contarlo el amigo Evil me resulta imposible no reirme

"Fair Wairning" por ""Intensities in 10 Cities" es un cambio bastanta razonable, no te puedes quejar.

Evil Elvis escribió:

Mi familia tiene especila fijación con mis figuras rockeras: mi figura de Alice Cooper fue enviada al suelo de un culetazo de mi madre a la estanteria sobre la que estaba que tuvo como resultado las dos manos limpiamente amputadas; Lemmy también sufrió amputaciones de los dos brazos cortesia de un sobrino que usó al Motorhead como herramienta para repartir palos por toda la casa.

Pues yo me compré hace poco la figura de Joey Ramone y como soy tan manazas cuando lo estaba sacando de la caja protectora vi que no salía y tiré y tiré hasta que salieron las dos piernas por un lado y el tronco por otra. El pobre Joey parecía un zombie de "Walking dead".
Pero luego lo pegué bien y lo mantengo alejado de cualquier sobrino.

Como ya he leido mas arriba, lo que voy a contar nos ha pasado a muchos.
Día de reyes de 1991, yo con 13 años, me llevo un sorpreson esa mañana al comprobar que me habían regalado un disco no esperado.


Esa mañana lo escuché un par de veces. Tocaba ir por la tarde a casa de un amigo para ver si tenía alguna novedad musical. Nada en el horizonte. Yo llevaba mi recién novedad discográfica. Todo impaciente por pinchar este disco en el equipo de mi amigo, mas el que yo, todo hay que decirlo, pues siempre ha sido mas fan d ela banda.
Voy a sacar el vinilo de su funda, cuando no me doy cuenta y estaba al reves. Inevitablemente un ¡CRACK!!!!! sonoro emanó de aquel disco. Lo siguiente que recuerdo es unas risas totalmente histericas de mi amigo, ante la cara estupefacta de un servidor.


Ante el estruondoso relajo y risas de mi querido amigo, hace acto de presencia en la estancia su querida madre

Tras contarle lo sucedido, su madre se marcha. Pasados unos minutos de tal tragedia, la cara de mi amigo cambia completamente, al darse cuenta que tras esas risas, su mundo también era golpeado. Pues el también se quedaria sin paladear aquel universo sonoro. Todo hay que decir, que solo se me jodió las tres primeras canciones.....así que el que no se consuela es por que no quiere.
El susodicho album sigue tras todos estos años en mi estanteria...........

El mío es un clásico para todos los que tenemos mascotas.
Mi gato,mi querido gato,el cabrón de mi gato durante 15 años
se dedicó a limarse las uñas en los lomos de mis discos,no quedó
ni uno sano.¿Cómo pude querer tanto y tanto a un gato tan
joputa?...murió hace años y todavía le echo de menos (q.e.p.d.)

LOU RIP escribió:

El mío es un clásico para todos los que tenemos mascotas.
Mi gato,mi querido gato,el cabrón de mi gato durante 15 años
se dedicó a limarse las uñas en los lomos de mis discos,no quedó
ni uno sano.¿Cómo pude querer tanto y tanto a un gato tan
joputa?...murió hace años y todavía le echo de menos (q.e.p.d.)

Mi gata, Raulita, se afilaba las uñas en las cajas de cartón que tenía repleta de cedés, aunque afortunadamente nunca la tomó con los vinilos ni con las revistas. También me la encontré algunas veces en el mueble del equipo de música inspeccionando el material.

Cuando hice la mudanza, me llevé las cajas a mi nueva casa y no las quiero tirar porque a) las tengo repletas de cedés y b) tiene arañazos de mi difunta Raulita (esas cajas tienen un valor sentimental incalculable).



La auténtica Raulita, la gata más heavy que me he echado nunca a la cara (la foto es de mi hermana)...

De momento, ganan por goleada las historias de vinilos hechos añicos.

Yo me encontré en un rastrillo benéfico un single de "Another Brick In The Wall" de Pink Floyd que debió sufrir algún accidente doméstico rockero y le faltaban varios trozos (que no estaban en la funda). Al final, tras inspeccionar el disco, no lo compré.

Durante una época curré en un pub los fines de semana y había discos que llevaba los viernes y sacaba los domingos. Un domingo que no había nadie nos hinchamos a porros... bueno, aunque hubiese gente también lo habríamos hecho. Como siempre escogí los discos que quería escuchar y me dirigí al coche, un 4L, por cierto, con el compañero de curro y una amiga, si mal no me acuerdo. El caso es que a unos 200 metros empezaba una cuesta bastante empinada y a los pocos metros oígo un golpe a nuestras espaldas. Paro y veo los vínilos desparramados por el medio de la Nacional VI. Me los había dejado encima del techo del coche cuando saque la llave para abrir la puerta Al final la única baja a lamentar fue el Badmotorfinger, por cierto.


Otra bastante cachonda fue en presencia de un colega. Siempre fui bastante remiso a la hora de prestar discos, más que nada porque normalmente siempre he sido muy cuidadoso con mis pertenencias y dejarlos era una fuente de malos rollos sin sentido por mi parte. El caso es que el tipo llegó a mi casa y subió directamente a mi habitación. Cuando entró había un plato de judías con jamón en la única silla de la habitación (no pregunteis) y al sacarla para que se pudiese sentar se me escurrió entre los manos, con el resultado de que el contenido del plato se fue a parar a los vínilos que tenía en una estantería. Lo que más indignó a mi colega es que sabiendo lo que me costaba dejar discos no le diera ninguna importancia al suceso y permaneciese impasible (y en realidad no tenía importancia alguna, los discos estaban muy apretados y la mayoría en fundas de plástico, así que salvo 4 o 5 a los que el mejunje alcanzo de lleno y les quedo una pequeña marca grasienta no tuvo mayores consecuencias para mi carrera de especulador disqueril).

José Fernández escribió:

Durante una época curré en un pub los fines de semana y había discos que llevaba los viernes y sacaba los domingos. Un domingo que no había nadie nos hinchamos a porros... bueno, aunque hubiese gente también lo habríamos hecho. Como siempre escogí los discos que quería escuchar y me dirigí al coche, un 4L, por cierto, con el compañero de curro y una amiga, si mal no me acuerdo. El caso es que a unos 200 metros empezaba una cuesta bastante empinada y a los pocos metros oígo un golpe a nuestras espaldas. Paro y veo los vínilos desparramados por el medio de la Nacional VI. Me los había dejado encima del techo del coche cuando saque la llave para abrir la puerta Al final la única baja a lamentar fue el Badmotorfinger, por cierto.


Otra bastante cachonda fue en presencia de un colega. Siempre fui bastante remiso a la hora de prestar discos, más que nada porque normalmente siempre he sido muy cuidadoso con mis pertenencias y dejarlos era una fuente de malos rollos sin sentido por mi parte. El caso es que el tipo llegó a mi casa y subió directamente a mi habitación. Cuando entró había un plato de judías con jamón en la única silla de la habitación (no pregunteis) y al sacarla para que se pudiese sentar se me escurrió entre los manos, con el resultado de que el contenido del plato se fue a parar a los vínilos que tenía en una estantería. Lo que más indignó a mi colega es que sabiendo lo que me costaba dejar discos no le diera ninguna importancia al suceso y permaneciese impasible (y en realidad no tenía importancia alguna, los discos estaban muy apretados y la mayoría en fundas de plástico, así que salvo 4 o 5 a los que el mejunje alcanzo de lleno y les quedo una pequeña marca grasienta no tuvo mayores consecuencias para mi carrera de especulador disqueril).

SENCILLAMENTE GENIAL!!! Somos un foro modesto para realizar grandes desembolsos pero
eres un candidato muy serio a llevarte este trofeo .

LOU RIP escribió:

José Fernández escribió:

Durante una época curré en un pub los fines de semana y había discos que llevaba los viernes y sacaba los domingos. Un domingo que no había nadie nos hinchamos a porros... bueno, aunque hubiese gente también lo habríamos hecho. Como siempre escogí los discos que quería escuchar y me dirigí al coche, un 4L, por cierto, con el compañero de curro y una amiga, si mal no me acuerdo. El caso es que a unos 200 metros empezaba una cuesta bastante empinada y a los pocos metros oígo un golpe a nuestras espaldas. Paro y veo los vínilos desparramados por el medio de la Nacional VI. Me los había dejado encima del techo del coche cuando saque la llave para abrir la puerta Al final la única baja a lamentar fue el Badmotorfinger, por cierto.


Otra bastante cachonda fue en presencia de un colega. Siempre fui bastante remiso a la hora de prestar discos, más que nada porque normalmente siempre he sido muy cuidadoso con mis pertenencias y dejarlos era una fuente de malos rollos sin sentido por mi parte. El caso es que el tipo llegó a mi casa y subió directamente a mi habitación. Cuando entró había un plato de judías con jamón en la única silla de la habitación (no pregunteis) y al sacarla para que se pudiese sentar se me escurrió entre los manos, con el resultado de que el contenido del plato se fue a parar a los vínilos que tenía en una estantería. Lo que más indignó a mi colega es que sabiendo lo que me costaba dejar discos no le diera ninguna importancia al suceso y permaneciese impasible (y en realidad no tenía importancia alguna, los discos estaban muy apretados y la mayoría en fundas de plástico, así que salvo 4 o 5 a los que el mejunje alcanzo de lleno y les quedo una pequeña marca grasienta no tuvo mayores consecuencias para mi carrera de especulador disqueril).

SENCILLAMENTE GENIAL!!! Somos un foro modesto para realizar grandes desembolsos pero
eres un candidato muy serio a llevarte este trofeo .

Hombre, pues gracias, pero no soy muy de jamón, la verdad.



Ejem.